CÁMARA DE SALAMANCA ENTREGA LA MEDALLA AL MÉRITO AL ‘VITI’, AL ‘NIÑO DE LA CAPEA’ Y A JULIO ROBLES
La Cámara de Comercio de Salamanca, durante el Pleno Extraordinario celebrado en esta mañana, ha entregado la Medalla al Mérito empresarial de la Corporación a ‘El Viti’, a ‘El Niño de la Capea’ y a Julio Robles, a título póstumo, por su trayectoria empresarial, destacando su sobresaliente contribución a la imagen de nuestra provincia, siendo inmejorables embajadores de la tierra salmantina.
El Pleno Extraordinario ha contado con la presencia de un gran número de representantes del mundo taurino: empresarios del sector, ganaderos, toreros, entre otros representantes políticos, empresariales y personalidades de la sociedad civil y militar.
Durante el acto, el secretario general, Emilio Checa, ha descrito la trayectoria empresarial de los tres maestros, así como su aportación al desarrollo de un sector clave de la economía salmantina. "Estos toreros han dejado una huella imborrable en la tauromaquia y han contribuido al prestigio de Salamanca y de España".
Benjamín Crespo, presidente de la entidad cameral, expresó su gratitud y admiración por las contribuciones no sólo de los homenajeados, sino también por la dedicación de todos aquellos que participan en la tauromaquia, por su aportación altruista en muchas ocasiones y su contribución al desarrollo económico de nuestra región.
Por su parte, Pedro Gutierrez Moya ‘El Niño de la Capea’, quien habló en representación de los tres, ha confesado sentirse "enormemente agradecido" por el reconocimiento que la Institución Cameral le ha otorgado y también ha querido hacerlo extensivo a todos los miembros de su familia y a sus compañeros de profesión.
Finalmente, Benjamín Crespo cerró el acto destacando el papel decisivo de las Cámaras de Comercio y recordando que “somos la única Cámara a nivel nacional que cuenta con una comisión taurina, demostrando nuestro compromiso con la preservación de nuestras tradiciones culturales y el impulso a un sector que no sólo es parte integral de nuestra identidad, sino también un motor esencial para el progreso económico de Salamanca”.